de Valentina
(para 4 personas)
INGREDIENTES
PREPARACIÓN
Batir las alubias hasta obtener una consistencia lo más lisa posible. Añadir la harina de frutos secos y el cacao; amalgamar bien. Por otro lado, fundir el chocolate con el edulcorante, el aceite de coco y la pizca de sal. Añadir los superalimentos, si has decidido usarlos. Incorporar todo a la masa de garbanzos mezclando bien. Entonces, colocar la masa en el frigorífico durante al menos 20-30 minutos. Preparar el cacao en polvo y los otros ingredientes para cubrir en dos platos. Extraer la masa del frigorífico y crear con las manos muchas bolitas. Pasarlas por las coberturas preferidas, y alinearlas en una bandeja. Mantener las pequeñas trufas en el frigorífico. Son muy buenas para merendar o como postre sano, o como tentempié para compartir con los amigos junto con el té.
Aunque yo no soy vegana, limito el consumo de productos animales a ocasiones especiales y de “degustación”. En mi cocina cotidiana trato de usar alimentos lo más naturales posible, gracias a la vida de campiña, que me garantiza huevos frescos y algunos quesos locales. Además, el descubrimiento del deporte, ha aumentado mi interés hacia alimentos lo menos industrializados posible y con un contenido de proteínas alto, pero sostenible, como las legumbres.
Algunos de los mejores dulces del mundo son veganos, a partir de las diversas y conocidas marcas de galletas y una famosa tarta de chocolate estadounidense, que se puede realizar completamente sin productos animales. Sobre todo los postres con chocolate quedan muy ricos: la riqueza de sabor del chocolate amargo, exaltada con una pizca de sal y especias, como la vainilla y haba tonka (una deliciosa especia muy usada en la cocina francesa, en forma de haba deshidratada, que se ralla como la nuez moscada), no permite notar la ausencia de ningún ingrediente. Y la unión se vuelve perfecta, cuando se combina con el sabor delicado de las alubias rojas, que desde siempre se han usado también en la pastelería asiática, sobre todo en Japón.
Con dulces como estas pequeñas trufas, he engañado a mis abuelos, a mis amigos y a los familiares. Más que como postres, son excepcionales para acompañar un café al final de la comida o una merienda rápida antes del gimnasio. Usa chocolate de calidad, mucha vainilla y las especias que más te gusten. Para que sean veganos al 100%, evita la miel y usa sirope de agave o de arce.
Soy Valentina, fotógrafa Una transición de la campiña entre Marcas y la Romaña a los Estados Unidos, me ha vuelto apasionada de la cocina natural y vegetariana, pasión de la cual ha nacido Hortus Cuisine, el blog que desde hace tres años se ocupa de 'green food', relacionado con la tradición mediterránea y la fotografía. Cuando no tengo mi Canon en mano, amo escribir y aprender sobre la gastronomía y la enología.
Para un blog como el mío, las legumbres constituyen el alma: son la esencia de la cocina mediterránea; una sierva pobre pero hermosa, generosa y llena de recursos.